Hombro Congelado o Capsulitis retráctil

El hombro, componente esencial del complejo cervico-escapulo-humeral, desempeña un papel fundamental en la vida cotidiana. Desde tareas laborales hasta actividades recreativas, el hombro participa activamente en la interacción con nuestro entorno. Sin embargo, patologías como el hombro congelado o capsulitis retráctil, pueden comprometer gravemente su funcionalidad.

La capsulitis retráctil se caracteriza por una pérdida de la elasticidad en la membrana sinovial y el complejo capsulo ligamentoso del hombro, lo que dificulta su movimiento.

Existen dos tipos de hombro congelado: primario, cuya causa aún es desconocida, afectando al 2-5.3% de la población; y secundario, asociado a enfermedades como diabetes, hipotiroidismo o traumas, con una prevalencia variable entre 4.3% y 38%.

Esta variabilidad en la prevalencia indica la necesidad de más investigación en el área.
 

Diagnóstico y tratamiento de la Capsulitis retráctil

 
El diagnóstico adecuado es el primer paso crítico en el tratamiento de la capsulitis retráctil. Cabe descartar condiciones más graves, como infecciones, dislocaciones, tumores o procesos inflamatorios sistémicos, que requieran atención médica urgente.

Una vez establecido el diagnóstico, el tratamiento se enfoca en abordar las fases de la enfermedad. En la fase de dolor, la analgesia es primordial, mientras que en la fase de rigidez, se busca aumentar el rango de movimiento y la capacidad funcional del hombro.

En CESMAR Llagostera ofrecemos tratamientos muy efectivos con las últimas tecnologías para en el tratamiento de la capsulitis retráctil. Nuestro objetivo es guiar a nuestros pacientes en el proceso de recuperación para superar los desafíos asociados con esta patología.