La enfermedad de Dupuytren es una afección que se caracteriza por el desarrollo de tejido fibroso proliferativo en forma de nódulos y cuerdas que afecta a la fascia palmar, produciendo una contractura progresiva e irreversible, que provoca el cierre de la mano y dedos. Empezando por la retracción del dedo meñique y el 4º dedo, acabando en la postura que se conoce por la “mano del papa”.
Su nombre se debe al barón francés Guillaume Dupuytren, que en 1833 había descrito por primera vez la fibromatosis palmar, atribuyendo la aponeurosis palmar, la contractura y el engrosamiento de la misma que produce la retracción de los dedos. Su tratamiento consistía en cortar la aponeurosis fibra por fibra, dejando los dedos extendidos sobre en una tablilla.
Tratamiento no invasivo de efecto regenerativo para la contractura de Dupuytren
Más de 100 años después el tratamiento de elección continúa siendo el quirúrgico, aunque con una técnica más precisa y menos lesiva; dejando la mano más funcional y con menos secuelas.
Otro tratamiento utilizado a día de hoy, es el uso de anestésicos y enzimas colagenasas, inyectados en las cuerdas y nódulos 24 horas antes de realizar una extensión forzada que rompe dichas fibras produciendo una menor retracción de la mano.
En Cesmar, después de 17 años de investigación en patología de la mano y de la extremidad superior; hemos pautado un tratamiento no quirúrgico, mínimamente invasivo y sin efectos acumulativos mediante ondas de alta frecuencia que produce un efecto regenerativo en todo el tejido lesional fibrótico de la mano; dando la máxima funcionalidad y mayor rendimiento a la mano.